domingo, 12 de julio de 2020

PALESTINA










No es Supermán,

ni una nube,

tampoco Papá Noel,

es una paloma blanca

sobre un cielo de guerras prometidas.

En Franja de Gaza,

los palestinos,

sólo pueden ver una

con el dedo en el gatillo.

No sea cosa que sea un avión israelí.

No sea cosa que sea un cohete.

No sea cosa que tenga olor a muerte,

como todo, últimamente.

No sea cosa que su suelo se desprenda

y pasen de ser sólidos a gaseosos

en un instante.

No sea cosa que no sean

nunca más.



Autor: Valentín Jáuregui

domingo, 5 de julio de 2020

BREAKING THE WALL











1.

El día que Alan Parker me convirtió en un mar de rabia,
el día que me recordó lo que es hallarse impotente
ante la quietud precedida,
sentí que una parte de mí se alimento de otra 
adentro mío.
La psicología del mundo
que sólo nos hace poner ladrillos y ladrillos, 
y más ladrillos,
en nuestro camino hacía el bienestar verdadero,
me trajo un enojo peculiar.
Obtenido y olvidado cuando era más corto 
en edad. 
Alan Parker me convirtió en un mar de rabia,
y antes, también, le dio play
a una opera inglesa de una banda extraordinaria
que me voló los sesos,
me narcotizó,
me desquebrajó, 
y me enamoró.

Todo eso
al mismo tiempo.


2.
 
Es un asesino en serie.
Tiene una maza en las manos, 
tu cabeza en el suelo,
y con ella hará el jugo que le plazca.
Usa técnicas actuales tanto como antiguas.
Es un asesino en serie que tiene nombre,
raza, religión y sexo definidos
pero no tiene rostro.
Es el Charles Manson de la sociedad moderna,
con instituciones a su labor 
y muchos más adeptos en su juego psicótico de dominación.
Alan Parker me convirtió en un mar de rabia,
y al sistema transformó 
en tirano.
Es, el capitalismo, un asesino en serie,
desde antes de la peli
e, incluso, anterior al mismo Parker.
En realidad, no había mucho que transformar.


3.

Nota de color: 

Tuve amores, sexo, 
muchas deficiencias,
enfermedades leves y graves,
odio y dolores,
pasiones, narcóticos, silencios.
Tuve mucho de poco o nada de todo.
Pero no se compara
con lo que el sistema les dió y les quitó
a Mr. Floyd
y tantos otrxs seres que, realmente, habitan este mundo.


4.

Rompamos los muros de este mundo careta.
Quiero que le gritemos en la cara 
al más conservador de los conservadores.
Que le digamos que la libertad nos tiene que pertenecer,
que hay partes desiguales
formando un todo imperfecto y cruel,
que dios es un tipo jugando a las payanas con sus hijxs,
que sus hijxs también lo son, 
que es mujer, 
y que es otro tipo imaginando 
los sonidos de un teclado sintetizador 
en lo oscuro de una celda de Devoto,
también.
La injusticia es una creación del sistema que nos oprime.
La más eficiente, 
de todas las maldades.
Rompamos los muros de este mundo careta
y algunas jetas 
al paso.


5.

Mientras miraba "The Wall",
me di cuenta que el ecosistema que habitamos
es un cubo con todas las comodidades
para no querer salir jamas
a conocer que hay por fuera 
del mismo.
Porque hasta eso nos crean,
falsas necesidades y falsas costumbres
que nos ubican entre la suma de los muros
que nos mantienen inconscientemente 
atrapadxs.
Salgamos de la zona de confort, 
y de ahí a romper todo.


Autor: Valentín Jáuregui.




POESÍA CATÁSTROFE, ARMAGEDÓN













Si tuviéramos que definir Armagedón y sólo nos guiáramos por la biblia, se simplificaría en algo así como el sitio donde se dió la batalla entre Dios y aquellxs que no lo aceptaban como máxima autoridad. Ahora, a lo largo de la historia, el término quedó reducido a ser el fin del mundo ocurrido mediante una catástrofe

Esta definición es a la que voy a aceptar, por una cuestión de tiempos y de no creer en un dios supremo. Aunque de la bíblica voy a mantener el fuego ardiendo de lxs rebeldxs. 

Armagedón nos llamaremos porque tengo la creencia de que la poesía puede ser una catástrofe para todo lo que está preestablecido.

 

¡BIENVENIDOS Y BIENVENIDAS!

 

Hay mucho que romper. Ardamos juntxs.